Todo
esto
agítase,
ahora mismo,
en
mi vientre de macho extrañamente.
este libro de Rivera Garza originalmente estuvo por titularse Hombres frágiles.La lectura seguramente hace ocioso ese nombre más explícito que el que finalmente quedó, potentemente sugestivo, y que aparece en el epígrafe que cierra (de modo contrario a lo habitual) el último cuento:
"Nos sentamos por la tarde, observamos la oscuridad que lentamente se desdobla: ningún reloj cuenta esto."
Ted Hughes, September
Entre otras cosas, Ningún reloj cuenta esto es una maravillosa exploración literaria de formas íntimamente extrañas, y descentradas, de la masculinidad

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